La coalición de izquierdas Nuevo Frente Popular (NFP) arrebató este domingo a la extrema derecha la victoria en las elecciones legislativas en Francia, donde se abre un período de incertidumbre sobre quién gobernará al no lograr ningún bloque la mayoría absoluta.

El NFP obtendría entre 177 y 192 de los 577 escaños de la Asamblea Nacional (cámara baja), seguido de la alianza de centroderecha del presidente Emmanuel Macron con entre 152 y 158 y del partido ultraderechista Agrupación Nacional (RN) y sus aliados con entre 138 y 145, según la última proyección de Ipsos, a la espera de los datos oficiales.

Los resultados suponen un revés para la líder ultraderechista, Marine Le Pen, que aunque gana diputados, fracasa en su intento de lograr una mayoría, incluso absoluta, que las proyecciones consideraban posible hace apenas unos días.

"Nuestro pueblo ha rechazado claramente el peor escenario posible", declaró el líder de izquierda radical Jean-Luc Mélenchon, para quien el NFP, que carece de mayoría absoluta, deberá "gobernar", pero sin "entablar negociaciones" con la alianza de Macron.

El ministro del Interior, Gérald Darmanin, respondió que "nadie puede decir quién ganó la elección" y llamó al oficialismo a abrirse al partido de derecha Los Republicanos (LR), que lograría entre 63 y 67 escaños.

Los pactos implícitos entre el oficialismo y la izquierda, consistentes en concentrar el voto en el candidato con más posibilidades de derrotar a RN en cada circunscripción en el balotaje, frustraron la victoria ultraderechista.

El candidato de RN a primer ministro, Jordan Bardella, denunció una "alianza del deshonor" y aseguró que su partido "encarna la única alternativa" para "enderezar" Francia.

"La marea sube. Esta vez no ha subido lo suficiente, pero sigue subiendo y, en consecuencia, nuestra victoria sólo se ha aplazado", abundó Le Pen.

Artistas, deportistas, sindicatos y organizaciones llamaron a frenar la llegada al poder de la extrema derecha, como la estrella del fútbol Kylian Mbappé, que pidió votar "del lado bueno".

Desde Italia, el papa Francisco advirtió este domingo contra las "tentaciones ideológicas y populistas", sin mencionar a ningún país.