En Piedades de Santa Ana, una casa destaca cada año por ser una de las primeras en encender el espíritu navideño. Es el hogar de Rosa Mora y Henry Oviedo, una pareja de esposos que, desde el 1.º de octubre, comienza a celebrar la Navidad (repase la historia completa en el video adjunto). 

Esta tradición de adelantar las festividades nació debido a sus viajes por trabajo, como artesanos del barro. Tanto Rosa como Henry son artesanos y alfareros, y cada año, durante los últimos meses, viajan a una feria de artesanía en Cuba. Para ellos, decorar la casa antes de irse les permite extender la magia navideña y disfrutarla por más tiempo.

Las decoraciones no solo son un acto de celebración, sino también de dedicación a su oficio. Parte de su preparación para la Navidad incluye restaurar las piezas de su portal. Días antes de colocar los adornos, es común verlos dando los últimos retoques a las figuras del pesebre, un trabajo que hacen con amor y esmero. Según la tradición católica, colocar el “pasito” en el suelo asegura la protección y la fortaleza del hogar.

A pesar de sus viajes, Rosa y Henry no dejan de compartir el espíritu de esta época tan especial con su comunidad. Durante el tiempo que están en casa, abren las puertas de su hogar para que los vecinos del Triunfo, en Piedades de Santa Ana, puedan disfrutar de la calidez navideña que han creado.

Para esta pareja de artesanos, la Navidad es más que una fecha en el calendario, es una oportunidad de unir a la comunidad y celebrar las tradiciones con alegría y generosidad.