La arquitecta y representante de la Unión Provincial de Limón (Uniproli), Carla Carranza, aseguró que la decisión del Ministerio de Obras Públicas y Transportes (MOPT) de sustituir los pasos a desnivel por rotondas en la ampliación de la Ruta 32 es condenar a Limón al subdesarrollo.

En audiencia ante la Comisión de Infraestructura, Carranza aseguró que no hay ninguna justificación técnica para instalar estas rotondas en la vía, que además se anuncian como temporales cuando la historia hace pensar lo contrario.

“Las rotondas no son una solución viable para esta ruta. Ninguna carretera se puede manejar con 50 metros de derecho de vía, tenemos que tener aceras, ciclovías, calles marginales, conexiones, paradas, nada de eso se está contemplando.

“Están condenando a la provincia de Limón al subdesarrollo, a continuar rezagado en relación con el resto del país”, dijo.

Según la experta, las rotondas se instalarían además en un espacio muy limitado, lo que provocaría problemas de giro para camiones articulados y expondría el tránsito a accidentes.

“Son rotondas en un espacio muy limitado, con una ruta que mueve la mayor economía del país. Esto no solo es un tema de falta de presupuesto, es una urgencia por concluir, cortar la cinta y estrenar la obra, habilitarla a como dé lugar”, añadió.

“Somos un país que no tenemos una economía fuerte, no podemos pensar que una rotonda se desecha para construir un paso a desnivel. Aquí en Costa Rica los famosos puentes Bailey duran más de 10 años, 30 años, y son temporales”, dijo.

Wálter Guzmán, también representante de Uniproli, aseguró que el proyecto, bajo los plazos y avances actuales, no estará listo en 2025, como anunció el MOPT, pero se inaugurará incompleto.

“Claro que es para cortar la cinta, porque el proyecto no se va a terminar en abril 2025, eso lo tenemos que tener bien claro, lo que se va a hacer es habilitar cuatro carriles, como han venido haciéndolo, por sectores. Es un picadero del proyecto”, criticó.

El liberal Luis Diego Vargas, presidente de la comisión, cuestionó que ese interés de inaugurar obras incompletas se está volviendo algo habitual en esta administración.

“La miopía de querer cortar la cinta al rato nos pone a pensar. Estamos claros que estos son paliativos y más buscando vernos en inauguraciones a medio camino, no tan terminado, y a mí, por lo menos, sí me gusta el repellito bien finito, bien acabadito, no lo que hemos estado viendo. Hay que terminar las obras, pero hay que terminarlas bien”, aseveró.

El MOPT ya inició con la construcción de dos de las 10 rotondas que espera instalar en la Ruta 32, la principal vía comercial del país.