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MSc. Henry Álvarez / coach en desarrollo humano, liderazgo y familia.

¡Qué importante es examinar los pensamientos! Porque uno se convierte en lo que piensa de sí mismo. Si usted piensa que es una persona fracasada, eso será; si cree que no puede, no podrá. 

Los límites los pone uno, como alguien dijo: “Usted es el arquitecto de su propio destino”.

Lo que estoy tratando de decir es que mi realidad es el resultado de mis propias decisiones, y mis decisiones están muy íntimamente relacionadas por lo que pienso, por lo que siento, por lo que creo.  De allí la importancia de examinar los pensamientos, porque tienen poder en la persona en que me quiero convertir.

Por ejemplo, las historias vividas del pasado. Si venimos de una familia donde nos decían que no íbamos a poder, especialmente cuando sufrimos limitaciones económicas, de muchas carencias emocionales, donde lo que escuchamos solamente es usted no va a poder, es que no hay, no se puede, es que no alcanza, eso que quieres hacer no es posible; y crecemos con esos pensamientos negativos, nuestro interior estará lleno de todos estos mensajes, y, por lo tanto, nuestra mente de pensamientos negativos.

Hay que estar haciendo una evaluación de los pensamientos, y aquellos negativos, sustituirlos con positivos.

Aquí tomo el consejo del apóstol Pablo, lo cito: 

“… Todo lo que es verdadero, todo lo justo, todo lo puro, todo lo amable, todo lo que es de buen nombre; si hay virtud alguna, si algo es digno de alabanza, en esto pensad”.

Cuando uno tiene una mente positiva, la actitud cambia hacia las dificultades. Si queremos cambiar el entorno externo negativo, se necesita primero cambiar lo interior, cualquiera que sea su realidad interior, es su realidad en el exterior, no podemos cambiar la realidad exterior, sino que cambiamos primero la realidad interior.

Quiere decir que cuando empezamos a reiniciar los pensamientos negativos con pensamientos positivos, la situación adversa exterior va a cambiar.  Si no cambiamos nuestros pensamientos, no cambiaremos la realidad, pues la creamos nosotros mismos.

Hay que empezar a cambiar el patrón mental, de tener esa mente de pobre, a tener una mente de riqueza, la riqueza y la pobreza está en nuestra mente, todo lo que ocurre en lo visible, ocurrió primero en lo invisible, en esa parte interior de la mente.

Como lo dijo el gran sabio de la era antigua, el rey Salomón: 

“Porque cuál es su pensamiento en su corazón, tal es él”.

Actuamos y somos, por lo que pensamos. Es decir, lo que hay en la mente, es de lo que vamos a hablar, por eso las palabras tienen poder, muy bien lo dijo el rey Salomón:

“La muerte y la vida están en poder de la lengua”.

Veamos algunas características de una persona que tiene su mente llena de pensamientos positivos.

  • Un sentimiento fuerte de alegría, a pesar de las dificultades, porque no debemos de permitir que nos gobiernen emocionalmente. 
  • Logramos abordar todo de forma positiva, lo cual nos permite enfrentar cualquier situación, no importando cuan adversa sea.
  • Ver en cada situación negativa una oportunidad para aprender, cambiar y crecer.
  • Vamos a tener una gran fuerza interior, con una solvencia emocional y el umbral para enfrentar las dificultades bien alto.
  • Tiene ideas muy claras para alcanzar sus sueños, no se rinde, avanza con firmeza hasta alcanzar sus sueños.
  • Se mantiene enfocado, con un alto nivel de responsabilidad y compromiso.
  • Vive una vida plena, próspera, con un fuerte sentimiento de autorrealización.
  • Su pasión es agregar valor y bienestar a las personas.

Termino diciendo lo que dijo el apóstol Pablo a los hermanos romanos:

“Cambien su manera de pensar, para que así cambien su manera de vivir”.

¿Quiere cambiar su manera de vivir, del pobrecito, que no va a poder, de que es un fracasado o que ese sueño es incansable para usted?

Empiece cambiando los patrones mentales negativos con pensamientos positivos, y conviértase en esa persona que sabe qué desea hacer y lo hace, que se siente realizada, que tienen un fuerte sentido de pasión y está enfocada en su propósito.

Cito lo que dijo Mark Víctor en su libro Atrévete a soñar:

 “El pensamiento positivo, como el creer hablar y actuar positivamente, favorece los negocios, tanto en el ámbito personal como empresarial y gubernamental”.  

Mientras, John C. Maxwell dijo:

 “ La actitud es lo que marca la diferencia. La actitud no lo es todo, pero es algo que puede hacer la diferencia en tu vida”.

Deberíamos ejercitarnos en pensar, sentir y ver positivamente, es decir, usemos la imaginación, visualicemos lo que queremos, los sueños. Es importante y necesario que estos pensamientos sean positivos, creativos, imaginativos y constructivos.

Si requiere guía en orientación familiar y matrimonial puede escribirme al teléfono 8613-9136. 

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