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Estamos en la parroquia de Concepción de La Unión para conocer a un sacerdote que quizás usted ya haya escuchado mencionar por sus notables obras y su excentricidad. Sin embargo, para él, todo se resume en la frase de San Agustín: “La fama busca a quien le huye y huye de quien la busca”.

Obtener esta entrevista no fue fácil. El Padre Denis Féliz de la Cruz, conocido por su humildad, inicialmente se mostró reacio a hablar en cámaras para contar su historia. Pero, gracias a Dios, logramos que compartiera su inspirador recorrido (repase la nota completa en el video adjunto). 

Una vida de fe desde Barahona

El padre Denis nació en Barahona, República Dominicana, y creció en una familia profundamente católica junto a sus seis hermanos. Desde pequeño, la fe estuvo presente en su vida.

A los seis años, tuvo una visión durante una misa, un evento que no comprendería completamente hasta años después. Con una honestidad refrescante, el sacerdote nos contó que incluso tuvo novia antes de dedicarse por completo al sacerdocio.

A los 13 años, se unió al camino neocatecumenal, donde comenzó a vivir su fe de manera más comprometida. Esta experiencia cimentó su vocación y lo preparó para su futuro en la Iglesia.

La misión que lo trajo a Costa Rica

Hace 20 años, el padre Denis llegó a Costa Rica en una misión de 14 días para predicar a otros sacerdotes. Sin dinero ni agenda, solo con la fe y el deseo de tocar puertas en las iglesias, cumplió su misión. Al terminar, Costa Rica necesitaba un sacerdote y él respondió al llamado.

Desde entonces, ha hecho una diferencia notable en cada lugar donde ha servido. Ha construido tres iglesias: en San Diego de La Unión, en Cinco Esquinas de Tibás y ahora en Concepción de La Unión. Sin embargo, para él, la infraestructura física no se compara con el impacto espiritual que ha tenido en las familias, matrimonios y jóvenes, reviviendo el espíritu de la comunidad.

Un compromiso con la comunidad y la familia

El padre también está profundamente comprometido con el movimiento “Matrimonios en Victoria”, donde ha servido como asesor espiritual durante 14 años, fortaleciendo la estructura familiar integral. 

Además, cada miércoles, comparte su mensaje a través de un programa en Radio Fides, ampliando su alcance y apoyando a más personas con su palabra y consejo.

La dedicación del sacerdote a su parroquia y comunidad es evidente en cada detalle. La iglesia de Concepción de La Unión, con sus lujosos detalles, no es solo un edificio hermoso, sino un símbolo de su amor y devoción a su congregación.

Una celebración continua

En Concepción de La Unión, la labor del padre Denis no solo se mide en términos de estructuras físicas, sino en la revitalización espiritual y comunitaria. Su historia es un testimonio de fe, perseverancia y servicio. 

Hoy, la comunidad no solo celebra la luz eléctrica en sus hogares, sino también la luz espiritual que el padre Denis ha traído a sus vidas.

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