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Hace 20 años, el payaso “Trompezón” hizo su debut en una fiesta infantil cuando menos se lo imaginaba, sin saber que, años después, este personaje sería motivo de alegría para muchas familias y también le daría carácter y actitud positiva a su intérprete para enfrentar las pruebas que la vida le ha puesto en el camino.

“Yo empecé como payaso Chupetín porque una vez llegamos a una fiesta a dejar unos regalos y no había quien animara, entonces yo decidí pintarme la cara y empezar el show”, recuerda Mauricio Elizondo, quien da vida al personaje.

Luego de cambiar su nombre a “Trompezón”, porque el anterior nombre ya lo usaba otro colega, este alegre personaje continuó trazando su camino en este gremio del entretenimiento (repase la nota de Más Que Noticias en el video adjunto).

“Mi misión no es solo dar alegría, sino también dar un mensaje de que Dios nos ama a todos”, asegura Elizondo.

Superando obstáculos


“Pensamos que ser payaso y llevar alegría es algo fácil, pero nosotros también enfrentamos problemas y pruebas, pero de la mano de Dios todo es posible”.

Con esa frase es que Elizondo empieza su relato cuando tiene que hablar sobre todas las pruebas de salud que ha tenido que atravesar a sus 46 años.

“Hace cinco años sufrí una caída de siete metros de altura que provocó una fractura en mi cráneo, coágulos en el cerebro y me indujo en un estado de coma durante siete días”, expresó.

Asegura que las oraciones de la gente y la ayuda de Dios han sido lo que lo sacó de esa dura prueba. “Los médicos decían que yo no volvería a caminar”.

De aquel duro momento las únicas secuelas que enfrenta son la pérdida del olfato y del paladar.

Por si fuera poco, Elizondo recientemente enfrentó un cáncer de piel. No obstante, tras someterse a un par de cirugías, pudo recuperarse de la mejor manera posible.

Para contactar al payaso “Trompezón” puede comunicarse al teléfono 8745-2005.

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