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El Tribunal Penal del Segundo Circuito Judicial de San José condenó a dos exregidores de la Municipalidad de Santa Ana por los delitos de legislación en provecho propio, en concurso con un delito de incumplimiento de deberes. 

Los exregidores de apellidos Montero Salas y Marín Guerrero, fueron encontrados culpables, y por lo tanto, condenados a un año de prisión, así como a la inhabilitación para ejercer cargos públicos y de elección popular por un período de dos años. 

Además, se les ordenó cancelar dos millones de colones a cada uno por concepto de daño social ocasionado por la violación al deber de probidad.

Los hechos se remontan a una sesión del Concejo Municipal del año 2017, cuando se sometía a votación la participación de los involucrados en un congreso en Corea del Sur, financiado con recursos públicos. 

Los exregidores omitieron su deber de abstenerse de votar, y por el contrario, sufragaron a su favor. Esta acción contravino el Código Municipal y violó el deber de probidad.​​

La sentencia que fue notificada este lunes a las 10:41 a.m. aún no se encuentra en firme.

"Este caso llama a reflexionar sobre la obligación que tenemos las personas servidoras públicas de gestionar adecuadamente los conflictos de intereses. Destaco que la investigación de esta causa se originó en una denuncia ciudadana", expresó Armando López Baltodano, Procurador Director de la Ética Pública. 


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