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El Tribunal Supremo de Elecciones (TSE) descartó utilizar la Papeleta Única Electrónica (PUE) en los comicios nacionales del 1.° de febrero de 2026.

Los magistrados acordaron en su sesión 116-2024 —del jueves anterior— dejar de lado esta solución en virtud de su alto costo.

El acuerdo se tomó con base en una evaluación que hizo la Dirección General del Registro Electoral y de Financiamiento de Partidos Políticos tras la implementación de un plan piloto que se puso en marcha durante las votaciones municipales pasadas, celebradas el 4 de febrero de 2024.

Si bien el informe de esa instancia arroja un "óptimo funcionamiento" de los dispositivos, así como los beneficios de la solución tecnológica en las distintas fases del proceso, se determinó que su costo es elevado.

Con el fin de valorar la continuidad de esta modalidad de votación en futuras elecciones, el Registro Electoral realizó un sondeo de mercado a través de Sistema Integrado de Compras Públicas (SICOP) entre el 20 y el 31 de mayo anteriores, para conocer intenciones de oferta. En él, solicitó a los posibles oferentes cotizar cuatro escenarios. 

Dos empresas mostraron interés en participar. Ambas, para un escenario de aplicación en el 25% de las juntas receptoras de votos (JRV) de Costa Rica, estimaron costos en $3.500 por la utilización de cada máquina.

Ese monto es considerado "muy elevado" y, por ende, la relación costo-beneficio, a juicio del reporte, "no es favorable ni aconsejable" para la institución.

De igual manera, se mencionan razones logísticas, las cuales no son tan apremiantes de una elección presidencial, como sí en una de corte municipal.

Por ejemplo, la cantidad de partidos presentes en la papeleta no incide negativamente en la hora promedio de transmisión de resultados y, además, no suprime la necesidad de impresión de papeletas en los plazos, cada vez más acotados, entre la culminación del proceso de inscripción de candidaturas y el inicio del empaque del material electoral para distribuirlo en todo el país.

Mientras en la votación de 2024 debían imprimirse 666 diseños distintos de papeletas, que requieren la utilización de tecnología digital, en la de febrero de 2026 serán solamente 8, lo que puede realizarse incluso mediante tecnología offset.

El Tribunal de Elecciones se inclinó por no utilizar esta tecnología hasta que el mercado ofrezca alternativas congruentes con las limitaciones presupuestarias que el país enfrenta.

Asimismo, acordó autorizar al Registro Electoral para que continúe investigando tecnologías de información que permitan facilitar los procesos de impresión de papeletas, conteo de votos y mejora de los tiempos de transmisión de resultados, sin que se debiliten las garantías de confiabilidad y seguridad del sufragio.

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