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Los agentes judiciales se encuentran en la primera línea de combate contra el crimen organizado. Testigo 7 conversó con el jefe de la Unidad de Crimen Organizado de Batán, uno de los distritos más afectados por la ola de violencia. 

“Acá la criminalidad era algo normal, pero desde que se desarticuló una de las bandas que controlaba la zona, surgió la banda de los Pérez Méndez, y con ella, la violencia se disparó”, explicó el jefe de la Unidad de Crimen Organizado de Batán.

Uno de los problemas más graves es el reclutamiento de menores de edad para cometer crímenes.

“Es un fenómeno que tenemos, los jóvenes de 14, 15 y 16 años son los que están llevando los homicidios. La mayoría de los sicarios son menores. Les roban la mente y les dan valentía para que lleven a cabo estos hechos, los cuales nos están afectando en la zona”, señaló.

“Aca matan por tan solo 75 o 100 mil colones" agregó el jefe de Crimen Organizado en Batán

La situación también ha puesto en riesgo la vida de los propios agentes judiciales. “Ahora nos disparan a nosotros. Es bastante estresante, pero hay que dejar el miedo a un lado y seguir adelante. Es parte de nuestro trabajo, y por eso estamos aquí”, afirmó.

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