Los partidos Unidad Social Cristiana (PUSC) y Liberación Nacional (PLN) decidirán, este fin de semana, la forma en que se elegirá a sus candidatos presidenciales en la crucial elección de 2026.

Ambas agrupaciones, caras históricas del bipartidismo, celebrarán sus asambleas nacionales en un ambiente marcado por la urgencia, pues ninguna de las dos se dice capaz de soportar un periodo más fuera del poder.

La primera asamblea será la de Liberación Nacional, este sábado, en medio de tensiones generadas por la división interna que supone la forma en que se elegirá al representante de los comicios.

Por un lado, un grupo insiste en que debe ser abierta a cualquier ciudadano, mientras que otro defiende que debe ser cerrada a partidarios.

“Esta decisión no es menor, tiene el potencial de marcar el destino de nuestro partido en un momento crítico de su historia. Hoy, más que nunca, debemos ser conscientes de que cada decisión importa y que no hay margen para el error.

“Optar por un proceso cerrado y excluyente sería un retroceso peligroso; por el contrario, un mecanismo abierto, amplio y democrático no solo asegura mayor participación, sino que también abre la puerta para que nuevas generaciones de líderes y lideresas se acerquen a nuestro partido. Ser más inclusivos no es solo una opción estratégica, es una obligación histórica para garantizar la renovación y relevancia de Liberación Nacional en el siglo XXI”, dijo el secretario general del partido, Miguel Guillén.

Efectivamente, esa decisión no es menor: el partido ya intentó sin éxito zanjar el tema en al menos dos asambleas anteriores, pero el crispado ambiente entre los partidarios ha impedido que exista humo blanco.

Los verdiblancos tienen más de 60 mociones qué discutir por delante, con la reciente aprobación de que el proceso de votación sea secreto y, además, la asamblea cerrada a los medios de comunicación.

Más sereno

En la otra acera, el PUSC se citó para este domingo con un ambiente que invita a pensar en un acuerdo común por mantener la convención abierta.

“Nos daremos cuenta el domingo (si hay apoyo generalizado a esa convención abierta). Históricamente, ha mantenido una convención abierta y se esperaría que siga así, pero los asambleístas tienen la última palabra.

“No he escuchado diferencias ni mayores objeciones, pero siempre podrían mocionar o cambiar, el estatuto faculta que haya convención cerrada mediante registro de militantes, pero hoy no vería que eso se dé, esperaría que sea convención abierta”, resumió el tesorero de la agrupación, David Rodríguez.

El otro tema importante es la definición de la paridad de género en los encabezamientos para las candidaturas a diputados en las diferentes provincias.

“Esos son los dos grandes temas a discutir”, acotó Rodríguez.

El PUSC llegará al 2026 con 20 años lejos de la presidencia de la República, mientras que el PLN se aproxima a cumplir 12 años de no gobernar.