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“Horrible, demasiado peligroso, vive uno con miedo de una bala perdida”: esa frase la dijeron varias mujeres en la Plaza de la Cultura, en San José. Ellas se refieren a algo que todos hemos percibido, la inseguridad; pero se trata de un fenómeno que no solo nos quita la paz, sino que también afecta nuestro bolsillo con modificaciones costosas en las casas.

Si usted busca videos antiguos de Costa Rica, notará, además de la paz, que las viviendas estaban más abiertas, con una pequeña cerca y con un amplio jardín. Hoy, los vecinos viven escondidos y muchas casas parecen búnkeres, porque la delincuencia se apoderó del país. Solo el año pasado, hubo 4.516 robos en viviendas, o sea, 12 cada día (ver nota completa en el video adjunto).

Si usted está pensando en protegerse, aquí le decimos cuánto le puede costar. El alambre de púas vale, en promedio, ¢14.000; el alambre navaja de acero inoxidable cuesta ¢12.000; si piensa en una tapia, entonces tenga en cuenta que el metro lineal vale ¢17.000, y una cámara de vigilancia ronda los ¢25.000.

“Siempre es bueno tratar de combinar varios elementos de seguridad y no solamente generar búnkeres en nuestras fachadas, pero sí combinen aspectos de seguridad para protegerse sin afectar la estética”, explicó el experto en seguridad, Esteban Ruiz.

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