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En la Galería 1887 del Ministerio de Cultura y Juventud, ubicada en San José, el arte se convirtió en un canal de sanación y empoderamiento para mujeres que enfrentaron situaciones de extrema vulnerabilidad. La exposición “¿Quiénes somos, de dónde venimos y hacia dónde vamos?” fue más que una muestra artística; fue un grito de valentía, resiliencia y superación.

Cada obra expuesta fue un testimonio íntimo. Autorretratos únicos contaron las vivencias de mujeres que, a través del arte, exploraron sus emociones más profundas y se atrevieron a mirarse con valentía. En este espacio encontraron más que pinceles y lienzos: hallaron una forma de sanar y alzar la voz (repase la nota completa en el video adjunto). 

Transformaron su dolor en arte, dejando plasmadas sus luchas, sueños y esperanzas. Cada pincelada fue un paso hacia la sanación, cada color una forma de mostrar al mundo su fortaleza.

El proceso creativo detrás de la exposición fue parte de un taller que tocó la vida de estas mujeres. El arte no solo se convirtió en su refugio, sino también en una herramienta de empoderamiento. Durante la creación de sus piezas, exploraron quiénes eran, reflexionaron sobre sus orígenes y soñaron con un futuro lleno de posibilidades.

Las paredes de la Galería 1887, impregnadas de estas historias, resonaron con un mensaje poderoso: incluso en la adversidad más profunda, hay espacio para la luz.

Aunque la exposición cerró el pasado diciembre, su impacto sigue resonando. Cada visitante se llevó consigo una lección sobre la capacidad transformadora del arte. Estas mujeres, que se negaron a rendirse, mostraron cómo el arte puede sanar heridas y reconstruir vidas.

Esta muestra no solo marcó a quienes participaron en ella, sino también a todos los que tuvieron el privilegio de ser testigos de su fortaleza.

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