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"En las últimas 72 horas, han recrudecido los acontecimientos violentos en Costa Rica". Así lo reconoció el ministro de Seguridad, Mario Zamora, este miércoles.

El jerarca se refirió a dos enfrentamientos armados, uno en Limón y otro en San José, en los que tres oficiales del Ministerio de Seguridad Pública resultaron heridos. 

En el primero de los casos, ocurrido en Pococí, dos agentes de la Unidad de Intervención Policial (UIP) recibieron disparos en la cabeza y la mandíbula cuando trataban de detener a un hombre de nacionalidad nicaragüense, sospechoso de un homicidio ocurrido el 1° de enero de este año. El atacante murió en el sitio, mientras que los policías se encuentran "fuera de peligro" en hospitales capitalinos.

El otro enfrentamiento fue este martes en el precario El Pochote, en Barrio Cuba. La Fuerza Pública se desplazó tras recibir el reporte de una persona que estaba disparando un arma de grueso calibre. Al llegar al lugar, las autoridades fueron recibidas a balazos y se vieron obligadas a responder al fuego. El hecho terminó con un uniformado herido y un supuesto delincuente muerto.

"Si bien es cierto la Policía ha podido detener y poner a disposición judicial personas relacionadas con hechos de sicariato, hemos observado que, en las últimas 72 horas, se han presentado, en distintas partes del territorio nacional, en donde no tenemos en este momento operaciones como las que sí tenemos en Limón y en Puntarenas, hechos, lamentablemente, de muerte", agregó.

El ministro también mencionó el homicidio de cuatro personas en playa Garza, Guanacaste, en circunstancias que aún no están claras. En este caso, realizan un dispositivo policial en la zona, en conjunto con el Organismo de Investigación Judicial, para tratar de dar con los responsables.  

"Esta guerra de bandas que se está dando en el territorio nacional es lo que estamos enfrentando desde la Policía y vamos a seguir trabajando en esa dirección", concluyó Zamora.

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